Conversaciones con

Roger Kuhn

Comunidad
mayo de 2022

PridePride

Pronombres: él

En esta temporada, rendimos tributo a los activistas, pasados, presentes y futuros, que se pronuncian a favor de la liberación queer y la igualdad de derechos. Uno de los principales defensores es el Dr. Roger Kuhn, un indígena queer de dos espíritus de la cultura soma y originario de Poarch Creek, que trabaja como terapeuta sexual y educador sobre la sexualidad. Su trabajo explora los conceptos de descolonización y desestabilización de la sexualidad y se centra en la forma en la que la cultura influye e informa sobre nuestras experiencias físicas. Además de su trabajo como psicoterapeuta licenciado, Roger es profesor de la facultad de Estudios Indígenas en la Universidad Estatal de San Francisco, miembro del Consejo del Centro Cultural de Indígenas Norteamericanos de San Francisco, organizador comunitario de la asamblea de los indígenas norteamericanos de dos espíritus del área de la bahía de San Francisco (BAAITS), y miembro del Comité Asesor de la comunidad LGBTQ+ de la Comisión de Derechos Humanos de San Francisco.

¿Cómo te convertiste en activista?

He sido activista la mayor parte de mi vida. El recuerdo más antiguo que tengo del activismo fue cuando mi madre me llevó a un piquete a los cuatro o cinco años de edad. No entendía realmente lo que estaba haciendo allí, pero me encantó lo que la gente estaba haciendo. Sabía que mi madre creía en algo. Soy miembro de la nación de Poarch Creek. A mí me radicalizaron como indígena cuando tenía unos diez años. En el lugar donde está ubicada la reserva, la gente quería construir un bingo en lo que se consideraba un entorno sagrado, en un lugar llamado hoy en día Alabama. Mis tías y tíos protestaron, y yo estuve realmente implicado en esa causa. A esa edad entendí lo importante que era proteger los lugares sagrados, nuestra identidad, nuestra cultura y nuestra forma de vida. No había vuelta atrás de las protestas y ser activista a favor de los derechos indígenas.

A medida que fui creciendo y comencé a entender mi sexualidad de una manera distinta, mi activismo pasó a estar a favor de lo que ahora llamo las personas de dos espíritus y asegurarme que tuvieran visibilidad e inclusión en una variedad de espacios, ya fuera sobre salud y bienestar, el arte o espacios culturales como los powwows.

Pride
PridePride

Para aquellos que no están familiarizados con el término, ¿puedes explicar qué es “dos espíritus”?

“Dos espíritus” es un término que fue acuñado en 1990 por la Dra. Myra Laramee, originaria de la nación Fisher River Cree. La historia es que el término le llegó en un sueño, y ella lo compartió con un grupo de activistas indígenas que se reunió para lo que hoy en día se llaman reuniones internacionales de Dos espíritus. Proviene de la palabra de algonquina del norte niizh manitoag, cuya traducción más próxima es el término “dos espíritus”. Fue una manera de ir contra la terminología etnográfica utilizada por los antropólogos para describir las variaciones de género y de orientación sexual que observaron en los grupos indígenas cuando llegaron los colonos a estas tierras. Pensaron que el término “gay” no los describía en realidad porque con frecuencia reflejaba una perspectiva de la raza blanca. Así que quisieron utilizar un término que describiera nuestra cultura de manera que reconociera que mucho antes de la colonización, éramos considerados seres sagrados y desempeñábamos funciones en nuestras comunidades. Y así, “dos espíritus” se convirtió en un término amplio. El término “indigiquer” (indígena transexual) se está popularizando también.

Es importante resaltar que si ya existe un término en esa lengua indígena, ese será el término preferido por el grupo. Llámame utilizando el término que existe en mi comunidad y en mi comunidad decimos ennvrkvpv, cuya traducción más próxima es “en medio”. Yo no creo que encajo realmente en la categoría de gay, cis o masculino. Yo creo que mi atracción sexual hacia otras personas y mi género encajan en ese espacio intermedio.

¿Qué te llevó a ser profesor y terapeuta?

Creo que el relato de los dos espíritus está lleno de belleza, resiliencia y fortaleza y el origen de nuestra historia está cimentado en la violencia. En mi formación como psicoterapeuta, no se hablaba de las personas de dos espíritus. Era muy raro que se mencionara a las personas LGBTQ+. No entendía cómo podíamos abarcar estos principios psicológicos en un grupo para quien la psicología ha sido utilizada como herramienta de opresión. Me di cuenta de que las personas de dos espíritus no estaban incluidas en estas conversaciones y quise asegurarme de que estuvieran representadas en mi trabajo. Quise conocer a médicos, trabajadores sociales, psicoterapeutas y médicos de dos espíritus que estuviesen buscando también una comunidad. Y así, cuando comencé mis estudios de doctorado, me centré en la forma en que las personas de dos espíritus entienden el amor.

En la Universidad Estatal de San Francisco, puedes obtener una subespecialización en Estudios Étnicos Transexuales. El curso que enseño, “Sexualidad de los nativos y discurso transexual”, es uno de los cursos obligatorios que los estudiantes toman para cumplir con ese requisito. En él, abarco todo tipo de temas: desde la primera invasión, a la música, el teatro y los estudios de dos espíritus. Es sorprendente tener a estudiantes LGBTQ+ que no son nativos aprendiendo sobre este tema específico. Creo que una de las cosas que las personas de dos espíritus pueden ofrecer a los demás, en particular a los no nativos que se enfrentan a dificultades en temas de identidad, es decirles: “Aquí siempre serás bienvenido/a”. Tu identidad es lo autóctono en estas tierras. Era una realidad para nosotros antes de la invasión”.

Me muestro muy abierto con mis alumnos en relación con mi identidad de dos espíritus para que lo puedan ver en el aula de clase. Yo nunca lo viví. Ponerte frente a la clase y decir: “Yo soy de dos espíritus”, que otros estudiantes digan: “Yo soy de dos espíritus”, ese momento de conexión, de empoderamiento y representación, es lo que me inspira a seguir escribiendo, publicando, hablando y decir que sí a una oportunidad como esta. Utilizamos la expresión “salir del armario”, pero para mí, las personas de dos espíritus no salimos, regresamos. Regresamos a quienes éramos. Mi trabajo como psicoterapeuta y como profesor refleja realmente este regreso a quienes somos.

PridePride

Uno de los temas de tu tesis doctoral es la descolonización de la sexualidad. Exactamente, ¿cómo se logra eso?

Yo creo que cuando hablamos de descolonización, en las tierras que hoy en día llamamos Estados Unidos, nos referimos a una reclamación de la tierra. Y tenemos que reconocer a los seres que la habitan, y esos seres tienen algo que hoy en día llamamos sexualidad. La descolonización, de la tierra y de la sexualidad, no es solo para los no nativos. Se aplica también a las personas de dos espíritus y a nativos cuyo género varía también. Cuando estamos en proceso de descolonización, debemos reconocer el impacto que las ideologías sexuales coloniales han tenido en nuestros cuerpos. Así que cuando hablo de “descolonizar la sexualidad”, hablo de un retorno a la cultura que existía antes de la invasión.

Desde el punto de vista académico, “descolonizar la sexualidad” significa incorporar la formación, la información y el estudio en los programas de psicología y sexualidad. Cuando enseñas a los estudiantes a hacer terapia, o tienes un doctorado en Sexualidad Humana y no comienzas por los pueblos indígenas de estas tierras, estás perpetuando el daño. Si todo lo que aprendemos viene desde una perspectiva eurocéntrica, estamos perpetuando el daño. Así que cuando hablo de “descolonizar la sexualidad”, estoy diciendo que debemos incluir a los personas indígenas y de dos espíritus, porque si no, estamos haciendo el trabajo de los colonizadores.

Entonces, ¿qué pueden hacer los colonos para desestabilizar su sexualidad?

Desestabilizar la sexualidad significa mirar con ojo crítico la forma en la que entiendes la sexualidad de los demás y la propia, entender de dónde provienen tus perspectivas, pensamientos e ideologías y cómo puedes confiar en el conocimiento que se presenta de una forma diferente. Desestabilizar quiere decir también desempeñar un papel activo para ayudar a centrar la voz de los indígenas. Si tienes la capacidad, incluye a personas indígenas y permítenos tener una presencia permanente en la mesa, no solo participar en presentaciones. Reconoce y entiende tu papel de complicidad en la continuidad de estas ideologías.

Aunque soy defensor y activista a favor de la inclusión de las personas indígenas y de dos espíritus, mi trabajo no se detiene porque estoy en la sala. ¿Dónde están mis amigos musulmanes, mis amigas negras y asiáticas? Necesitamos a todos en la mesa para que podamos avanzar en este diálogo y realizar una aportación benéfica real para las personas, no solo para una persona que habla en nombre de todos los negros, indígenas y personas de color. Tengo la esperanza de que al defender lo que hago en el proceso de desestabilización, las personas abran los ojos, miren a su alrededor y digan: “¿Quién falta?”, y estén dispuestas a dejar que otros participen.

Pride

Como psicoterapeuta de la cultura soma, estudias el cuerpo y la forma en que la cultura determina cómo lo entendemos.

Inventé el término de “cultura soma”, de la misma manera que otras personas inventaron las palabras “psicoterapia”, “trauma”, y “medicina”. Es algo que estábamos experimentando, pero no teníamos una palabra para ello. Los eventos, como el lugar de nacimiento, donde vives, la identidad de género, la orientación sexual, la religión, la clase social a la que perteneces, todo ello forma parte de la cultura e influye en la manera en que percibimos, sentimos y respondemos al mundo que nos rodea.

En mi trabajo clínico y de aula, observo que la mayoría de nosotros vivimos tan apartados de nuestros cuerpos, que solo vivimos en nuestra cabeza. No queremos sentir nada, porque no hemos aprendido a hacerlo como cultura. Le hemos dado permiso a la gente a ignorar las respuestas de sus cuerpos. Entender la forma en que la cultura determina e influye en nosotros es la clave para nuestra liberación.

Nuestros cuerpos guardan historias basadas en la alegría, la tristeza y el trauma, y esas historias están unidas a la cultura.

Roger Kuhn

¿Cómo se aplica un enfoque cultural soma en la práctica? ¿Cómo se refleja en tu propia vida?

Sé que mi cuerpo ha sufrido un fuerte impacto de la cultura que me rodea. En la escuela primaria a la que asistí, solo había chicos blancos. Se burlaban de mí por mi identidad, y físicamente me hacían sentir más pequeño, menos que ellos e ignorado. Quería esconderme. Nunca me sentía atractivo ni hermoso. Y cuando crecí y me fui de Dakota del Norte, cuestionaban y me preguntaban constantemente sobre mi etnicidad. Hubo hombres que coqueteaban conmigo pero perdían enseguida el interés en cuanto les decía que era nativo americano. ¿Cómo podía esa situación no tener un impacto en mi cuerpo? ¿Cómo puedo no internalizarla y pensar que hay algo malo en mí?

Pride

Crecí pensando que los hombres blancos más mayores probablemente serían abusadores porque esa era la cultura en mi casa. Los hombres blancos eran violentos. No creo que sea así a nivel personal, pero eso fue lo que mi cuerpo entendió de niño: tenía que tener miedo a los hombres blancos, que yo era menos que ellos. No puedo entender cómo la cultura puede no tener un impacto en nuestras experiencias físicas.

Desde la perspectiva de la cultura soma, estando en un estado de alerta permanente como persona de dos espíritus y queer, mantengo mi cuerpo en una postura particular. Temer que alguien me vaya a atacar o a hacerme daño modela el cuerpo en cierto sentido. Se ve mucho en hombres homosexuales muy musculosos. Es una forma de fetichismo del cuerpo, pero también es una armadura que se ponen para protegerse.

Pride

¿Cómo llegaste a entender la relación entre el cuerpo y la cultura?

Antes de comenzar a estudiar psicología, estudié el masaje como terapia. Recuerdo que mientras me formaba, una colega tocó una parte de mi cuerpo. Me di cuenta de que había un trauma ahí, porque cuando comenzó a trabajar en la zona, solo quería llorar. Y tuve un recuerdo intenso de una situación traumática en mi vida. Fue la primera vez en la que me di cuenta de la relación: nuestros cuerpos guardan historias basadas en la alegría, la tristeza y el trauma, y esas historias van unidas a la cultura. Así que mi trabajo consiste en sanar al mismo tiempo esa parte del cuerpo y el trauma. Cuando trabajo con personas para sanarlas en el entorno terapéutico, llevo sus cuerpos a la sesión y exploramos dónde tienen un trauma, y cuál es la historia que lo generó. Y a través de la terapia, hacemos lo posible por cambiar esa relación.

Eres realmente un ferviente creyente en los poderes restauradores del placer.

Una de las razones por las que soy terapeuta sexual es porque creo que el placer sana. Trabajo con mucha gente que tiene problemas fisiológicos. En mi trabajo, puedo ayudar a la gente con esos problemas a restaurar el placer en sus vidas y reconocer la alegría que sienten al reconectarse con sus cuerpos de estas nuevas maneras. Yo creo que el placer va más allá de lo que pensamos en relación con el sexo.

El placer puede ser cualquier cosa desde bailar, a crear arte o a entablar una conversación como esta. El placer es cuando estoy en la sala con otras personas de dos espíritus y miramos alrededor y vemos que no solo hemos sobrevivido a cientos de años de gobiernos norteamericanos intentando destruirnos, sino que además lo estamos haciendo bien. El placer es trabajar con el powwow de dos espíritus del área de la bahía de San Francisco, dándole la bienvenida a 5000 personas y ver la alegría en sus caras. Reconozco el poder del placer como modo de sanación. En mi trabajo de psicoterapia, le digo a la gente: “El placer sana”. Ser más expresivo con la presentación de género o la orientación sexual nos lleva a una mayor liberación. Mientras más entendamos nuestra cultura y nuestros cuerpos, mayor será la sanación.

Defender el placer es lo que me aporta mayor alegría. Poder caminar por Market Street llevando la pancarta “Descolonicemos la sexualidad” fue un gran momento de activismo del placer para mí. Fue increíble poder hacerlo, poder mostrar mi trabajo de esta manera. Me podían ver y cuando tu trabajo puede ser visto y la gente te dice que respeta lo que haces, eso te marca.

PridePride

¿Quiénes son las personas o mentores que allanaron el camino para que pudieras llegar donde estás ahora?

En primer lugar, quiero reconocer el trabajo de Randy Burns de la nación Paiute del Norte y Barbara Cameron de la nación Standing Rock del pueblo Lakota. En 1975 formaron el primer grupo indígena llamado Gay American Indians. Fueron los pioneros de lo que hoy en día llamamos el movimiento de dos espíritus. Comenzaron algo en 1975 y yo soy solo una de las muchas personas que siguen ese trabajo. Ellos lucharon y sus voces fueron escuchadas y luego continuaron muchas personas brillantes que se apoyaron en ellas. La Dra. Myra Laramee, Albert McLeod, Beverly Littlethunder, Marlon Fixico, Steven Barrios, Ruth Villaseñor y Miko Thomas, quienes comenzaron los BAAITS powwow. Admiro a todas esas personas y me siento muy afortunado de llamarlos familia. También me gustaría agradecer a mis tías y tíos, y por supuesto, a mi madre. Ellos me enseñaron a sentirme orgulloso de ser de Poarch Creek. Ellos son la razón por la que hago lo que hago.

Finalmente, quiero darle un fuerte aplauso a mi yo a los 13 años. He estado haciendo este trabajo desde hace mucho tiempo. A veces, lo olvido. Otras, cuando me siento agobiado, saco mi carnet de estudiante de octavo grado y miro al Roger de 13 años. Dejé mi comunidad nativa un año y me encontré nuevamente en una escuela de blancos. Ya estaba metido de lleno en mi mentalidad de activista en ese momento y decidí llevar una camiseta que decía: “PATRIMONIO SÍ, LUCRO NO. SALVEMOS HICKORY GROUND”. Él sabía lo que hacía a los 13 años, y ahora que tengo 45, también lo sé. Soy la misma persona hoy. Ese niño sigue estando dentro de mí.

¿Qué legado te gustaría dejar?

Espero que el trabajo que he realizado con la descolonización y la desestabilización de la sexualidad inspire a otras personas. Espero que mis ideas sobre la liberación cultural soma inspire a otras personas a abrirse paso en distintas direcciones.

En un mundo que reduce de manera sistemática y borra a los transexuales, especialmente a los que están en una intersección de formas opresivas, ¿qué te da la audacia para incitar al cambio?

Lo que me da la valentía es que mi pueblo sobrevivió al intento de genocidio de los pueblos nativos de estas tierras. Lo que me da la valentía es mis 15 años de estudios y mi doctorado. Me dijeron que eso era lo que necesitaba para que me tuvieran en cuenta, y así lo hice. Jugué a lo que quisieron que jugara. ¿Que tengo que saltar por encima de algún otro obstáculo? Muy bien. Lo haré también. Lo que me da la valentía es la liberación. Tengo tanto derecho a la liberación como cualquier otra persona. Lo que me da la valentía es reconocer que hay millones de personas que creen en lo mismo que yo, indígenas o no. No es nada que haga solo. Lo hago con el apoyo de mis antepasados, sintiendo las manos de miles de personas detrás de mí, que me dicen: “Sigue adelante Roger. Estamos contigo. Te necesitamos”.

Pride

Mucho de lo que tenemos hoy en día supera los mayores sueños de nuestros ancestros transexuales. ¿Cuáles son tus mayores sueños de liberación para la comunidad queer?

El mayor sueño que tengo para nuestra comunidad queer es que se nos incluya, como lo estamos, en todo lo que queramos hacer, que llegue un momento en nuestras vidas en el que nuestra identidad como transexuales sea reconocida, como lo era antes de la invasión. Mi mayor sueño es que podamos volver al concepto de vnokecetv: amor comunitario. Sé que nunca nos devolverán las tierras en el transcurso de mi vida. Sueño con que como persona queer, estemos todos unidos y nos aseguremos de ser incluidos y progresar, poniendo el foco en el placer en nuestras vidas.

Al final, espero poder ayudar a sanar aunque sea una pequeña parte de este mundo tan increíblemente bello y jodido en el que vivimos. Si puedo cambiar al menos la vida de una persona, habré hecho mi trabajo como ser humano. Me encuentro en una posición muy afortunada por poder hacer esto por muchas personas. Pero lo único que tengo que hacer es cambiar a una persona, y esa persona puedo ser yo. Si soy mejor persona por el trabajo que realizo y los desafíos a los que me enfrento, el efecto se multiplicará.

Esta entrevista ha sido editada para hacerla más concisa y clara.